Víctimas y vulnerabilidad


Los 'animales' como los vegetales siempre seremos vulnerables en este mundo a todo lo que desconocemos y que nos puede sorprender en cualquier momento, sin terminar de escribir sobre ello. 
Pero si he llegado hasta aquí puedo seguir escribiendo sobre el tema y terminarlo, si nada interrumpe la escritura. 
Como les decía al empezar, no importa si somos animales 'inteligentes', "irracionales" pero susceptibles de ser un buen bocado para otros más fuertes o víctimas de tanto endemoniado que busca diversión. Sensiblemente nos sentimos como en los cuento de Hadas, a merced de la bruja o de un ogro, cíclope o "lobo feroz*", como "Los tres cerditos o "Caperucita Roja", somos comibles  por el un "hombre lobo, un humano; aunque también los vegetales pueden hallarse con el mismo problema ,con tanto vegetariano por ser autótrofos, pues son deliciosos en algunos casos sin carne o con ella.
Tarde o temprano nos vemos en iguales circunstancias ante el más grande depredador, el hombre o mujer fuerte por su riqueza o Poder social, que le da el mundo o el grupo humano en que nos hallemos, porque en todos los sentidos podemos ser víctimas de lo inimaginable y no es cuestión de confianza, desconocimiento o estupidez; sólo en lo que da ese prestigio al fuerte, por servir a su megalomanía o a quien le aúpa para explotar lo suqye sea: belleza, inteligencia o su éxito artístico. Incluso por complacer a una chusma hambrienta o con sed de venganza y diversión, puedes servir a la maldad.
Cuando hacemos daño a otro semejante, sin ninguna necesidad que lo justifique, hay una ley de compensación para el causante como para el que lo sufre; así que podemos ser de cualquier forma eliminados en vida o antes de tiempo, y por cualquier cosa impensable, pero que domina la ley de la casualidades en este planeta y en todo el Universo. Aura mismo, una Supernova se está comiendo a una estrella enana. Cuestión de poder. Podemos pensar que la vida pueda acabar de cualquier forma que no sea precisamente lo que se dice: "se murió de repente", por un fallo natural en un organismo hunano. 
Así que, aunque nos duele enumerar la realidad de cómo podemos fenecer, allí van unas cuantas suposiciones en la feria de las casualidades que pueden tocar:
Podemos morir aplastados o triturados, fulminados, engullidos o tragados, pisoteados, troceados y despedazados vivos o muertos; degollados, asados vivos o ya muertos; ahorcados, asfixiados, atacados por el cualquier animal o humano semejante, reptil, fiera depredadora y en estos casos por hambre... Y raramente sobrevivir después de un ataque así. Morir por nuestra cuenta también es parte del problema, pues podemos sufrir una depresión u otra enfermedad mental, decidiendo por nuestra cuenta quitarnos la vida; también por circunstancias casuales o fenómenos naturales; pero se puede morir del susto o por el impacto de una gran explosión, un proyectil y no por algo provocado y sí de forma natural por un fallo de una de nuestras vísceras principales. Morir de risa cuesta creerlo, pero sí atragantados por no saber respirar mientras se ríe. Se descontrola todo. Incluso por una buena descomposición del estómago o asfixia. Poco importa el tamaño que se tenga como ser vivo consiente, para que termine la vida por una simple infección o un resfriado o incluso por ignición. Ni te enteras, quedas como la ceniza de un puro en décimas de segundo m, que bueno, no habrían funerarias, ni cementerios, soplabas y listo. 
Y si sires parte del observador como alimento o estorbo, que interesa eliminar para sobrevivir el que mira...u obtener ventaja, puedes convertirte en mártir o verdugo, ante el resto de los que puedes  creer que son sus enemigos, para seguir vivo y no ser el sospechoso.
Qué más da que seas incluso un vegetal o carne viva y pensante, por razonar tu propia  suerte o no, pero sí instintiva del peligro que acecha. Se trata de ser o no para otro...  Y ese es el grave problema de esta sociedad sin Amor que obra por su instinto básico. Podemos ser seres de tierra, agua o cielo, pero todos tienen sus depredadores naturales, hasta los microscópicos no se libran de su propio depredador y nosotros también somos parte de los virus, gusanos y bacterias, etc,. Aunque algunos vegetales también se preparan para no morir tan pronto y poder salvar su especie, creando sus propia auto defensa contra los que les atacan  Otra forma de inteligencia en la Naturaleza.  
Podemos morir de miles de formas,:a o envenenados o por inanición e insolacion..Y, hasta por amor. Pero también por ser humillados se hunde el espíritu se destruye la entereza de un ser humano o la de un animal por crueldad, pues por estar encerrados, quitándonos nuestra libertad sin culpa ninguna y hasta por ser vilipendiados se muere antes de tiempo;  por el dolor que causa el daño moral inesperado, por injusto; pero también "sin querer, queriendo"... nos matan o se pisa de otra manera la dignidad de los seres humanos o de aquél u aquéllos, que no piensan como nosotros y hacen sus leyes para salvarse del castigo;  favoreciendo sus aberraciones, obligando a otros a hacer lo que no desean los de su especie, en contra de la misma naturaleza creada y sus convicciones éticas y morales; tienen hasta leyes y derechos para defender lo ilógico ante lo injusto, que agrede a otros seres indefensos. Una forma de someter al vicio a los inocentes y honestos que sirven a sus convicciones éticas y a la educación recibida; pero esas leyes según la interpretación de los jueces existen, salvan do al canalla que comete el delito "por enajenación mental", esto alegan para no pagar el castigo completo sus abogados.
Puedes morir en manos del que piensa diferente, por temor a ser denunciado o por lo que se cree que es justo aplicarse, por defender tu propia integridad física o, por practicar una moral estricta y exigirla. Hasta por un modo de vida contrario al que delinque. 
En el fondo, toda etapa de vida tiene sobre su cabeza la espada de Democles amenazándolo. Y todo ser sin respetar su condición, color, forma de ser, pensar o vivir, no está exento de algún dolor por defender creencias, ideales, ideologías, su fe o sus principios.
Nadie puede estar seguro de su integridad física a lo largo de la vida, si se acerca al peligro o se sale de las reglas de convivencia, las del bien o las del mal; siempre habrá alguien recordándolo y cuál es su camino y quién paga o lo acepta, así le va en el mismo.
Nadie está libre de ser parte de un mal o de cualquier tentación ajena o propia... Pero también, nadie está ajeno de ser el depredador mismo o alumno o maestro como tal o lo contrario y servir al mal.  
Así que nada es casual porque no se busque, todo mal o bien llega sin torcer su dirección como prueba en este mundo, observa a 'su presa' y la escoge buscando el momento idóneo hasta en un portal del edificio donde reside su futura víctima...o, frente al mismo mirando como cancerbero para ver cómo la engaña y se la lleva cuando sale a la calle y la corrompe. Puede ser hasta un conocido o desconocido que se le cruza en su camino, sin saber que en cualquier oportunidad, la atrapará, sirviendo a  su aviesa forma de ser, para utilizar a su víctima como quiere y formar parte de sus instintos, aunque diga amarla. Su proyecto es y será el de un desquiciado o enfermo. Pero las apariencias nos dirán todo lo contrario.
...
Así que el mundo no ha cambiado en lo más mínimo, porque aún nos puede dar un grave disgusto sin poder evitarlo o dejarlo por escrito...Me afano en ello. ¡Hoy, los lobos son manada! Espero terminar este mío sobre el tema, pues lo hago con intención antes de mi muerte y que, quien sufre por lo mismo, sepa que somos más los que sabemos de "El Maligno", y que nunca me fié de lo aparente, cuando una voz en el silencio de la noche se escucha y expresa lo que tiene que comunicar: 
 "No te fíes de lo que percibas, todo es aparente, no lo olvides y piensa en ello".
Se nos puede pisotear individualmente o en conjunto a toda la sociedad, por un gobierno o por quién sea con delirios de grandeza, aunque no hayan razones que lo justifiquen. Pero siempre habrá un gran cabronazo en alguna parte de este mundo, muy listo y paciente y capaz de no dejar su vigilancia, para aprovecharse de la oveja, que se cree negra, por saber más y no sabe que es el lobo que siempre es el más listo. Ya lo dice el cuento de la fábula. 
Es que el Poder, por poco que se tenga, siempre mide su fuerza ante una posible defensa o lucha en pro de lo que desea que sea suyo, busca carne joven, domable, creíble y la macera mentalmente a su gusto, haciendo caso omiso de la  defensa del rebaño, porque son carneros u ovejas buenas e incapaces de saber  lo que piensa el lobo... Por lo que cree que es suyo y por ponerle la vista encima. Los pastores descuidados, escucharon "que venía el lobo", pero como les daba confianza por ser educado, no se preocuparon de las ovejas que asomaba entre sus melenas. El depredador  tendrá de su parte la suerte, incluso la de robar a quien con su esfuerzo y sacrificio ha trabajado. Es la Ley del fuerte en contra de lo que puedas alegar, si los jueces le dan la razón a cualquier imbécil con Poder, por temor, también, de perder su puesto de trabajo y lo conseguido. Y más cuando es amigo de abogados corruptos. Y la ovejita se hizo más negrac el tiempo, por servir como tal al lobo de mi relato. 
Como ven, sigue pasando y me temo que el plan para Europa en esta España es revolver en todos lados los rebaños,  donde le venga bien a los nostálgicos de cierto Poder, para imponerlo de nuevo en las naciones, la Historia se repite, no por olvido y sí por intereses de quienes son engendrados por el mismo Satanás, para la pesca esperada.
La crueldad en todas sus formas está en manos del más fuerte y puede ser ejemplo del cobarde, o el más listo sin nada que llevarse a las tripas, pero si le pagan por sus servicios olvida el daño que propaga.  Los propios errores son imposibles de rectificar o devolver al inocente y menos la vida o la dignidad de una familia o, a quien se le arrebata su potencial cultural y humano por servir a un canalla, que compra su silencio y se protege con amenazas. Por eso es "un lobo bueno".
Quienes están en manos del fuerte, prefieren adaptarse por necesidad a sus necesidades para sobrevivir o para salvar el tipo, aunque sea a fuerza de aguantar sus reacciones de ira, celos o problemas neurológicos y, por momentos crueldades para sentirse complacido comprobando cómo domina la situación y eso lo/la le hace feliz, dándole la seguridad que su víctima no le va a abandonar nunca. Le ha dado demasiadas lecciones y ha sufrido con ello, para comprender que si habla y cuenta la verdad de su situación, el o ella, está perdido o perdida. Peligra su vida y la de los suyos por amenazas del maníaco depresivo, que siempre lo/la tendrá a su lado; aunque sólo sea en lo aparente y la víctima se acostumbra a esos malos y terribles malo ratos, porque sabe que son parte de esa prueba de fidelidad, que impone un ser inseguro por enfermo y bipolar. Eso sí, ha comprendido que no tiene nada más a su favor, porque no ha podido hacer nada útil y continuado y seguro en su vida, por el control que ejerce sobre su persona, creando esa injusta realidad una dependencia de la que no puede desprenderse y en cierta forma sufre "síndrome de Estocolmo" pudiendo tener libertad par pedir ayuda; pues es quién da una opción o manera 'decente' en lo aparente, para poder sobrevivir si cumple sus expectativas, lo pactado o recomendado mientras crecía a su lado, pero sólo va envejeciendo porque su crecimiento espiritual y moral, está en manos de otro ser que domina su futuro y sabe que se le acaba...
No supo liberarse a tiempo de su manipulación y su  ira, como de su enajenación mental y su forma dominante de ejercer su voluntad, pisoteando su existencia y su dignidad. Lo saben los suyos, pero no se atreven a decir nada por temor al escándalo o por miedo a que se víctima de una tragedia por desobediencia.  El loco o la loca, se sale con la suya y su víctima no tiene existencia propia por depender de un ser enfermo, desquiciado y obsesivo. Otros familiares de la parte del enfermo que lo conocen, también se desentienden y callan, ninguno quiere lidiar con el loco; y el tiempo va pasando para su víctima y todo es aparente, formal y normal para las dos partes, víctima y verdugo se entienden a su manera y pasan periodos de paz o tranquilidad; son muy queridos y se juntan con personas que les creen buenas personas, pues necesita el depredador en caso de cometer cualquier barbaridad, ser conocido por buena persona e incapaz de hacer mal a nadie. Su buena fama se da en quienes son sentimentales y se lo creen todo y ofrece lo que cree que favorece su realidad. No está nunca seguro de su salud, de sus cambios de humor, de sus celos, de sus momentos de presión y ataque verbal con ira y humillación a su víctima. Necesita esa coartada y que le ayude en caso de cometer una locura en cualquier momento.  Ata cabos por inseguridad en cómo puede proceder. Se teme a sí mismo. Tiene su excusa hábilmente tramada y no deja cabos sueltos. Se deja conocer en el entorno que le rodea y "lo conocen como una buena persona, generoso, cariñoso y todo en apariencia es positivo, son los demás los raros por si acaso, pues de ellos habla para ponerse a salvo..."... "Aunque todo puede ir bien y no hay que alarmarse, siempre controla, pero teme que escape su víctima". En realidad sabe, que no es así y puede cometer alguna barbaridad, pero cuida que no lo sea y esos periodos le dan un margen de confianza. Su víctima piensa más o menos lo mismo, cree que puede aguantar su cobardía y no denunció el problema a tiempo y se sigue dando tiempo en el tiempo, para quedarse sin el... Se va adaptando a la canallada de una locura que somete a su servicio, pero de cara a sus parientes, todo parece maravilloso o es un ser normal y se hace servicial y muy agradable, está siempre libre de culpas en las apariencias, para favorecer el proyecto del  trastornado, caracterizado por la alternancia de una fase afectiva que puede convertirse de un momento a otro en  una obsesión depresiva y maníaca en este tipo de seres. Engañan al más listo. Mientras estos imbéciles anden sueltos se cree su víctima que puede escapar de sus manos. Así que se mimetiza para hacer creer que es un pobre diablo o diabla en sus manos, por necesidad sobrevive sin ver otra salida. Se sabe pillado en una ratonera de oro, por aquél que ya de paso le ha advertido y amenazado, lo que puede pasar a los suyos o así mismo, por no enfrentarse a la locura del imbécil que le contó un bello cuento de amor y cayó en un interminable agujero negro que supone ese inframundo.
   "Ranita Azul" es: A. Elisa Lattke Valencia

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